Es similar al gorrión común, con la parte posterior del cuello y el píleo castaño oscuro. Tiene un babero negro, ancho y grande, y las mejillas blancas. La hembra y los jóvenes son parecidos a los del común.
Su alimentación se basa en semillas, frutos, brotes y material vegetal. También incluye insectos y arácnidos, para alimentar a los pollos.
La pareja construye el nido con hierbas entrelazadas y tejidas, forrado con plumas, que coloca en árboles. Pone, de abril a junio, de 4 a 7 huevos blanco-azulados con manchas oscuras, muy marcadas en el polo grueso que incuba 11 días. Los pollos, alimentados por ambos padres, aunque principalmente por el macho, dejan el nido entorno a los 12 días.
Ocupa zonas abiertas con presencia de árboles a baja altitud.